ISAÍN MANDUJANO En el marco del 7 de junio, fecha que la vieja guardia política y periodística, celebra el día de la libertad de expresión, los candidatos de la Alianza por Chiapas (PRI-PVEM), José Antonio Aguilar de Bodegas, de la Alianza por el bien de todos (PRD-PT y Convergencia), Juan José Sabines Guerrero y del PAN, Francisco Antonio Rojas Toledo, se pronunciaron en que de llegar a ser gobernador del estado promoverán la despenalización de la difamación y la calumnia en Chiapas, de acuerdo a los lineamientos internacionales en materia de derechos humanos y libertad de expresión.¿Cómo creerles a este trío candidatos?.
Primero, cuando Aguilar Bodegas como senador de la República, aprobó el pasado 30 de marzo del 2006 una serie de reformas a la Ley Federal de Radio y Televisión conocidas como la Ley Televisa, en lo que se le ha denominado el atentado mas grave a la libertad de expresión en los últimos años.
Verifique esta información en la página www.arrodillados.com. El primero en la lista es Aguilar Bodegas.
Cómo creerle, al señor Sabines Gutiérrez, cuando siendo diputado del PRI de la LXI Legislatura del Congreso del Estado aprobó el 17 de febrero del2004 -aquel martes negro para la libertad de expresión en Chiapas-, aprobó las reformas al Código Penal que les envió el gobernador Pablo Salazar y que impusieron la sanción mas alta de cárcel para la difamación y la calumnia en toda América Latina. (Les recuerdo que sigue vigente. La faramalla aquella del 10 de marzo pasado de “dejarlo como estaba”, fue solo eso, un montaje).
Cómo creerle a Rojas Toledo, cuando como alcalde de Tuxtla Gutiérrez en octubre del 2001, promovió demandas penales contra los periodistas Fredy López Arévalo y Ángeles Mariscal, por esos mismo delitos que ahora promete despenalizar. Demandas que siguen vigentes.
Como creerlo cuando fueron los diputados de sus partido político quienes promovieron activamente y defendieron esa ley mordaza que ahora pretende descalificar.
Estas promesas de campañas, discursos y boletines, de Sabines Guerrero, Rojas Toledo y Aguilar Bodegas, valen la pena guardarlo para la posteridad. Son joyas de lo que podrían ser finalmente simples promesas de campaña como lo fueron las de Pablo Salazar.En campaña, el entonces candidato de la Alianza por Chiapas, Pablo Salazar, hizo promesas aun más prósperas que estas que han hecho los que pretenden ser sus sucesores.
Recuerdo que en el marco del III Congreso de Comunicación Educativa, celebrado en la Biblioteca Central Universitaria de la Universidad Autónoma de Chiapas, el 14 de abril del 2000, presentó entre otras promesas su documento “Gobernar es informar” que resumía su política de comunicación social de llegar a la gubernatura.
- Convertir a las estaciones de radio y televisión estatales en verdaderos difusores culturales para evitar que continúen como híbridos de medios comerciales en lo económico y oficialistas en lo político;- Impulsar la creación de una Comisión Estatal de Comunicación y Cultura para la observancia de las políticas estatales de comunicación;
- Presentar cada año de manera pormenorizada el gasto público en medios de comunicación;
- Definir los criterios de transparencia para el otorgamiento de recursos que provengan de los sectores públicos en el terreno de la comunicación social;
- Abrir nuevos espacios en radio y televisión estatal para construir foros de discusión de los problemas y retos de la entidad; y,
- Crear un Consejo Plural de Comunicación Social, con estatuto de organismo público, personalidad jurídica, independiente y consultivo, integrado con representantes de organismos públicos sociales, privados, culturales, profesionales y de la sociedad civil, con atribuciones para evaluar y opinar respeto de los contenidos de los medios de comunicación, para garantizar la libertad de expresión y el cumplimiento del derecho a la información."
¿Sabe cuantas de estas promesas se cumplieron?. Si acaso una, y hasta eso a medias, el primer punto, pues la Red Radio Chiapas dejó de ser un híbrido de medio comercial, al desaparecer mediante un decreto publicado el 9 de marzo del 2001, en el Periódico Oficial Número 24, el poder ejecutivo creó el Sistema Chiapaneco de Radio y Televisión.
Las otra promesas de campañas, fueron solo eso promesas y nada más.
Al contrario, el sexenio de Pablo Salazar pasara a la historia como un admnistración que pudo haber hecho mucho en materia de libertad de expresión, pero no quiso dar el paso adelante para ser vanguardia en el sentido democrático. Es, sí, vanguardia en lo que no debe hacer en sin ninguna sociedad y gobierno, en imponer restricciones a la libertad de expresión y libertad de información.
Por eso es bueno hoy rescatar esas palabras, esos discursos, esas promesas hechas por Aguilar Bodegas y Sabines Gutiérrez, en el marco del mal traído y mal llevado 7 de junio. Vale la pena conservarlas.
“Anuncio, que mi gobierno procederá a la DESPENALIZACIÓN DE LA DIFAMACIÓN (sic), acorde a las reflexiones que prevalecen en el Sistema Interamericano de Protección de los Derechos Humanos”, dijo Sabines Gutiérrez.
“Así, al ejercicio de la libre expresión que ya se vive en Chiapas, se sumará el reemplazo de las leyes penales sobre difamación por leyes civiles. Esto no significa, de ninguna manera, que dejaremos de reivindicar el derecho al honor, el derecho a la vida privada y a su protección que constituyen también derechos universales fundamentales. Los tratados internacionales vigentes suscritos por nuestro país también comprenden la obligación del Estado de proteger los derechos privados”, agregó el candidato a gobernador de la Alianza por el Bien de Todos.
En tanto, el candidato de la Alianza por Chiapas, Aguilar Bodegas, “se comprometió con los medios de comunicación a despenalizar el delito de difamación como un acto de justicia para quienes se dedican a esta actividad”.
“Lo anterior lo declaro, previo a la reunion de trabajo que sostuvo con diversos sectores del municipio de Palenque, en donde también se refirió a la Ley Mordaza, señalando que su posición es y será en este tema defender la libertad de expresión y nunca maquillar la realidad”, dice la misiva enviada desde su oficina de campaña.
Sin bien la palabras de Rojas Toledo no fueron del todo claras y precisas en lo que se refiere a la despenalización de la difamación y la calumnia, algunos colegas así lo entendieron, pero ahí se las dejo para que las recuerden desde hoy.
“Sin mordazas ni condicionamientos y garantizado plenamente la moderna libertad de expresión, formadora de la conciencia ciudadana, el candidato a gobernador del PAN, Paco Rojas reconoció y saludó a todos los trabajadores de los medios de comunicación que en Chiapas, han vuelto a reafirmar su compromiso con la sociedad”,expuso en su boletín su oficina de prensa:
“Garantizar en las leyes la moderna libertad de expresión, que tome en cuenta a los comunicadores y que respete a los ciudadanos, que no limite ninguna independencia y que nos lleve hacia una mejor sociedad, hacia una sociedad objetiva, plena y profesionalmente informada”, expresó en entrevista.
Estas palabras de los candidatos, parecen ser más una mera forma de tratar de congraciarse con un sector que se ha sentido ofendido por las políticas públicas en materia de respeto y garantías a la libertad de prensa, de expresión y de información en Chiapas.
Es difícil creer a palabras como estas, cuando la historia reciente nos ha comprobado que esas simplemente son promesas al calor de las campañas político-electorales. Mientras tanto, en el ocaso de este sexenio queda una deuda pendiente en materia de respeto a la libertad de prensa, de expresión y de información en Chiapas.